Las Cañadas del Teide.
(Un Cedro en primer término)
El inhóspito clima a más de 2000 m. de altitud, se puede considerar continental subalpino, a esa altitud no llega la influencia de los vientos alisios del N.E. salvo en contadas ocasiones, a estas alturas, rigen los vientos del S.O. muy secos y que motivan una zona de inversión térmica.
Las temperaturas sufren un gran contraste entre el día y la noche, por el día, la fuerte insolación provoca altas temperaturas que pueden alcanzar hasta más de 40ºC. en verano, luego, por la noche, bajan bruscamente llegando 7ºC. En invierno por el día se pueden alcanzar los 20ºC, y por la noche decender a los 12ºC bajo cero, o menos en determinadas zonas.
Vista de las Cañadas desde la Fortaleza.
En invierno las precipitaciones se producen de forma torrencial, con gran irregularidad y ocasionalmente en forma de nieve. En el Teide (3718 m) puede durar la nieve hasta tres mese y en la “Cueva del Hielo” (3.330 m) permanece el hielo prácticamente todo el año.
Las lluvias comienzan partir de octubre y terminan generalmente en marzo-abril, pero el número de días de lluvia es muy escaso. En invierno es frecuente que al amanecer las rocas y las plantas aparezcan cubiertas por la “escarcha”, y se formen placas de hielo. Las precipitaciones medias de las cañadas están entorno a 400 mm. Anuales.
En el verano las precipitaciones son prácticamente inexistentes y la insolación muy intensa, produciéndose a veces por las noches, un ligero rocío ocasionado por el brusco descenso de la temperatura.
Vista de Izaña.
Fuente: Instituto Nacional de meteorología.
El Teide en Invierno.
Con estos datos, nos podemos hacer una idea de lo duro que es para la vida desarrollarse en esas condiciones. Pues aun así, surge la vida en infinidad de formas y colores. Animales y plantas han evolucionado para adaptarse a un lugar tan hostil y cambiante. También es verdad que en esas condiciones, la competencia no es demasiado dura, no hay muchos que quieran pelearse por un trozo de terreno árido bajo el aplastante sol.
Aun así, hay más de cuarenta especies endémicas.
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Tajinaste picante y Rosarillo de cumbre
La intención de esta entrada no es otra que mostrar la variedad y belleza de la flora de las “Cañadas del Teide”. Si desea más información sobre dichas plantas visite la Web: http://www.floracanaria.110mb.com/
Alhelí del teide, (Erysimum scoparium).
Bejeque, pastelito, pelotilla, (Aeonium spathulatum).
Bejeques, Pastel de risco, (Aeonium smithii).
Borriza, (Ghaphalium teydeum).
Cabezón, (Cheirolophus teydis).
Chahorra, Chajorra, (Sideritis eriocephala).
Cañaheja, (Ferula linkii).
(Cerastium sventenii).
Por fin después de múltiples caminatas y más de 30 Km. de pateo, (debido a su gran escasez, por supuesto está catalogada en peligro extremo de extinción) hoy la retraté, la verdad es que ha merecido la pena el esfuerzo, es realmente bella y elegante.
Cedro canario, (Juniperus cedros).
Cerrillo de cumbre, (Arrhenatherum calderae).
Cerrillo, (Dactylis metlesiesii).
Codeso, (Adenocarpus viscosus).
Colleja, (Silene nocteolens).
Corazoncillo, (Lotus campylocladus).
Crespa, (Plantago webbii).
Estornudadera, Espirrera, (Andryala pinnatifida).
Fistulera, (Scrophularia glabrata).
Flor de Mal País, (Tolpis webbii).
Helecho, Doradilla, (Cheilanthes guanchica).
Hierva pajonera, (Descurainia bourgaeana).
Hierva pajonera, (Descurainia lemsii).
Jara, (Cistus osbeckiefolius).
Jarilla, (Helianthemum juliae).
Magarza del Teide, (Argyranthemum adauctum).
Malpica, (Carlina xeranthaemoides).
Moralito, (Rhamnus integrifolia).
Nébeda, Salvia de cumbre, (Nepeta teydea).
Perejil de cumbre, (Pimpinella cumbrae).
Pino canario, (Pinus canariensis).
En los márgenes de las Cañadas.
Poleo de monte, (Bystropogon originafolius).
Pompón de las cañadas, (Erigeron cabrerae).
Retama, (Spartocytisus supranubius).
Rosalillo de cumbre, ( Pterocephalus lasiospermus).
Rosalito del guanche, adelfa de monte, (Bencomia exspitulata).
Salvia de monte, mastranto, (Menta longifolia).
Tagasaste, Escobón (Chamaecytisus proliferus).
Taginaste picante, (Echium auberianum).
Taginaste rojo, (Echium wildpretii).
Tomillo, (Micromeria lachnophylla).
Turgayte, Cinco uñas, (Senecio palmensis).
Violeta del Teide, (Viola cheiranthifolia).
Algunos animales también lo consiguen. Unos ejemplos de gran belleza.
Pinzón azul, (Fringilla teydea).
Lagarto tizón, (Gallotia galloti).
Araña blanca, (Thomisus onustus).
Para saber más:
Consideraciones Sobre La Fitodiversidad De Las Cañadas Del Teide
WOLFREDO WILDPRET DE LA TORRE
Excelente artículo, Jesús. Las fotos son extraordinarias. Muchas de las plantas que nos muestras son desconocidas para mí, como la violeta del Teide, que todavía no he tenido el placer de encontrar. Un saludo.
ResponderEliminarExcelente las fotos y sus definiciones, muy interesante, todo lujo de detalles.-
ResponderEliminarSalu2 mi estimado amigo
Atte:Manuel EstevezR(Mafer)
Gracias a los dos por sus comentarios.
ResponderEliminarLa foto del cardo de Plata está hecha en la Cañada del Portillo y realmente no hace falta caminar casi nada para retratarla
ResponderEliminarTendrías que habérmelo dicho antes, no me hubiera dado la paliza buscando el “cardito”
ResponderEliminarTambién me hubiera ahorrado la pateada en el “Corral del Niño” y el dolor de un aguijonazo en el troco de la oreja izquierda, de una abeja que se me quedó enganchada en la pata de las gafas, “zarzalee” más que un chicharro sobre un risco, Todos se reían menos yo, todavía me duele cuando me acuerdo.